No lo parece, pero los correos electrónicos que recibimos pueden rastrearnos. Y no, no es una buena idea. Sin la protección adecuada, el remitente de un correo puede saber si lo hemos abierto, cuándo y, muy importante, desde dónde. Información que en un contexto empresarial jamás debería revelarse. Algo que, afortunadamente, podemos solucionar muy fácilmente.
Garantizando la confidencialidad al recibir correos
Cada vez que abrimos un correo electrónico, no solo accedemos a su contenido, sino que también interactuamos con datos que se descargan en servidores externos. Esta interacción, que a primera vista parece trivial, puede comprometer nuestra privacidad al revelar información como la dirección IP y, con ella, nuestra ubicación geográfica exacta. Sin embargo, Mail ofrece una solución efectiva para solucionar esta situación.
La funcionalidad de protección de privacidad en Mail, disponible tanto en nuestro Mac como también en el iPad y en el iPhone, es una medida proactiva contra el rastreo. Al recibir un correo, Mail solicita automáticamente el contenido remoto a través de los servidores de Apple, no directamente desde el servidor original de nuestro ordenador.
Este método asegura que nuestra ubicación y el momento en que accedemos al correo permanezcan anónimos, ya que la información se descarga de manera inmediata y automática, eliminando cualquier indicio de cuándo o desde dónde se leyó el mensaje.
Activar esta útil función en nuestro Mac es tan fácil como seguir estos pasos:
- Iniciar la aplicación Mail.
- Ir a Preferencias desde el menú Mail.
- Entrar en la pestaña Privacidad.
- Activar Proteger la actividad en Mail.
Veremos que se activará también en el resto de nuestros dispositivos, pero si queremos verificarlo, lo haremos así:
- Abrir la aplicación Ajustes.
- Seleccionar Mail.
- Acceder a Protección de la privacidad.
- Activar Proteger la actividad en Mail.
Puede parecer un detalle menor, pero la implementación de medidas de protección como la que ofrece Mail en este contexto es crucial para privacidad. Podemos gestionar nuestros correos de forma eficiente, sin miedo a que nuestra privacidad se vea comprometida. Igual que desactivar las previsualizaciones de enlaces en Mail, activar la protección de privacidad es un paso sencillo, pero definitivo para asegurar que nuestra actividad en la app Mail permanezca privada y segura, tan fácil como pulsar un botón.
En iDoo_tech | Cómo gestionar más eficientemente nuestro correo electrónico en el Mac gracias a las pestañas de Mail